domingo, 25 de abril de 2010

Crónica de un concierto

Como ya comenté aquí, Pauline en la playa es uno de mis grupos favoritos. Sus letras, aparentemente sencillas, consiguen emocionarme porque parecen escritas para que yo las escuchara en algún momento de mi vida. Puede que para la mayoría de la gente no suenen a nada en especial, pero su música me ha acompañado los últimos años mientras luchaba contra los elementos terrenales y extrasolares.

Ayer, por fin, pude verlas en directo. Durante mucho tiempo había esperado este momento, que por razones que ahora se me escapan no había ocurrido en varios años. No defraudaron al público en general, entregado en vista de los sonoros aplausos y los dos bises que tuvieron que hacer (con Las complas del iconoclasta enamorado de Vainica doble incluida), ni a mí, que presenciaba mi concierto particular.

Llegamos pronto, nos sentamos en un sitio discreto donde la magia de la música en directo nos envolviera, se apagaron las luces y me relajé, pensando en que todos disfrutaríamos del concierto sin anécdotas paralelas.

En la cuarta canción del concierto, Reparto de bienes, dos chicas cogieron las sillas libres que estaban al lado. Curiosa concidencia de lugar y de momento... Unas canciones después, su discreto acompañate se acercó. En cuestión de media hora, mi mundo menguó y menguó hasta tener a menos de dos metros de distancia las razones de mis esporádicos ataques de tristeza aguda.

Salí de la sala realmente agotada, pero orgullosa y feliz de haber asistido al concierto. Tendré pocas oportunidades de verlas en directo, era mi oportunidad y no quería desaprovecharla. Fui afortunada porque no podía estar mejor acompañada. Y sentí que cada nota, cada letra, sonaba esa noche para mí en mi mundo particular, pequeño pero muy grande a la vez.

Este fin de semana, mis pasos me traían de nuevo a Madrid, aunque por razones muy diferentes. Sigo sin encontrar otro sitio donde me encuentre mejor, aunque en cada esquina me persigan los recuerdos.

Actualización el martes 27 de abril: Dejo aquí, para quien tenga curiosidad, dos entrevistas al grupo: para la sala Heineken y para Al margen.

Y por último, la crónica del concierto, que tuve que rehacer a golpe de ipod el domingo y que parece que gustó tanto al resto del público como a mí :-)

8 comentarios:

  1. yo ya estoy de vuelta también. sin ningún concierto pero conseguimos que nos pusieran Rafaella Carra en Milán.
    BBHs

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  2. A estas alturas, ya no sé ni cómo me sorprendo: la ley de Murphy promete cumplirse siempre que le dé una pequeña oporturnidad...
    Ocurrió lo altamente improbable y sigo llenado mi cuaderno de anécdotas. ¿Será que mi futuro pasa por escribir un best seller tipo el diario de Briget Jones en versión turolense y retirarme definitivamente del mundo científico? jajaja
    En cualquier caso, hoy es lunes, semana nueva y preocupaciones nuevas, y me alegro de haber ido al concierto :-)

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  3. @PUAM Raffaella Carrà es una gran señora de la musica italiana...todo el respecto!!!
    @esthercita...pues tia me sorprendes siempre mas tu manera de ser..que grande has sido!! Como ya te dije yo le habria casualmente puesto un cicles en el pelo!!!Pero casualmente..jijijiji...Estoy orgullosa de ti ya que se ve que dominas todo y lo que no te mata te hace crecer..(no se si se dice asi en castellano)...

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  4. pues yo al final sí veré a norah jones!

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  5. sí?!?! y no puedo ir contigo?!?! con las ganas que me dan de repente de irme muy muy lejos... :-)

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  6. en bonnaroo, del 10 al 13 de junio en manchester, tennessee..

    you are welcome..

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  7. ups, el 7 y el 8 tengo que estar en Almería por un meeting de CALIFA (soy postdoc de ese proyecto ahora...) así que ése concierto me lo voy a perder :-(
    y mira que estoy buscando qué hacer este verano! era una buena excusa para saltar el charco! :-)

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