Hace un par de semanas, buscando cómo aliviar el calor de las tardes veraniegas, encontré una exposición de fotos con un nombre muy sugerente: Madrid, oh cielos!, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Ese día toco sesión de impresionantes fotos bélicas de Gerda Taro y Robert Capa, pero tenía claro que mi próxima visita me llevaría mucho más alto... Así que allí nos fuimos, a practicar el turismo alternativo que permite el estío (la terraza no abre todo el año) y disfrutar de esta ciudad desde otra perspectiva.
Creo que es el atardecer más bonito que he visto aquí, compartido "románticamente" con una no-entusiasta de la ciudad que esta noche también disfrutó en las alturas.
PD: Por cierto, como me dedico a hacer publicidad de allí donde voy, y como llevo 10 años en esta ciudad, me he presentado al concurso Madrileño del año: ¡votad por mí! ;-)
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